viernes, 27 de junio de 2014

SER DETECTIVE


¡Hola!

¿Os gustan las historias de detectives?   A mi me encantan, me apasionan, me gustan tanto que a veces creo que soy una detective...(sí, soy una fanática y loca lectora).  Obviamente, el detective que más me gusta es el dios de los mismos: Sherlock Holmes. Lo considero el mejor de los mejores, además fue de su mano por lo que más tarde me interesaría por todo tipo de novelas detectivescas. (no puedo evitar añadir que lo leía mucho antes de que apareciesen las modernas películas de ahora.

Conan Doyle no es al único que he leído, también a Agatha Cristie (Poirot, me encantó "Asesinato en el Orient Express, sobre todo por la cara de pasmada que se te queda con la solución del caso) y otras novelas de género misterioso y detectivesco, de estas novelas en las que tú sigues las pistas al par que el detective. Las últimas que leí son "El canto del Cuco" (el detective Strike no sólo es fantástico deduciendo sino que también es muy divertido) y la saga de "Sé lo que estás pensando" (el detective retirado David Gurney, a pesar de sus escalofriantes casos, tiene ese toque entre razonador pero a la vez ese estado emocional indeterminado que lo hace terriblemente atrayente).

Me gustaría saber cómo se llega a plantear realizar una historia así. ¿Sabe el autor desde el principio cada detalle del caso, no sólo el principio y el fin? ¿O quizás lo va realizando sobre la marcha como una novela de aventuras más?  Me siento muy impresionada por los autores que escriben este tipo de género pues deben tener una inteligencia maravillosa. No quiero decir que los demás escritores tengan una menor inteligencia al hacer género de aventuras, pues en ambos casos se necesita mucho de esta virtud para escribir. Me refiero a que el escritor de género detectivesco y misterio, al escribir debe ser y actuar casi como el mismo detective, con sus pistas en cada parte del libro, las cuales, al unirlas, acaban creando un perfecto puzzle del caso en general.

¿Os atreveríais a escribir una? A mí me encantaría, pero no sé si sabría hacerlas con ese toque tan interesante y misterioso que contienen todas las novelas de detectives. Si alguna vez tengo alguna, os la mostraré con gran ilusión por aquí.

Pegaso no es una novela de detectives, claro está, pero si me dejé influir por ese ingrediente de las pistas y de que el lector tuviera la oportunidad de resolverlas al igual que los protagonistas.  Además, siempre que escribía un nuevo capitulo de la aventura, buscaba insaciablemente que estuviera razonablemente enlazado con lo anterior y con aquello que pretendía que pasara más tarde. No sólo hacía esto con acontecimientos de la aventura, sino con pequeños detalles como por ejemplo los diálogos; no quería que uno de los personajes dijera  una frase o comentario sin más, debía de encajar con su personalidad, dicho comentario debía de estar razonablemente ligado al carácter y manera de ser del personaje.
Pero, aun así, me quedé con el anhelo de escribir una verdadera novela de detectives. Quien sabe, quizá me acabe animando cuando encuentre el "truco" para crearlas con ese toque de misterio que suele envolver a este tipo de historias.

En fin, nada más que decir por hoy. Sólo una pregunta ¿qué novela de detectives me recomendáis? ¿qué os parece las novelas que he mencionado? ¿cuál es vuestra favorita de las que habéis leído hasta ahora?

Os intentaré informar sobre Pegaso y su anhelada continuación en las próximas entradas.
Mientras tanto, seguid pensando en el mito de la pasada entrada, aquel de Belerofonte, quizás os sirva como "pistas" para la siguiente lectura de Pegaso. Me gusta eso de dejar pistas....
;)


Suerte, luz, fuerza y feliz día a todos

lunes, 23 de junio de 2014

NOCHE DE SAN JUAN


¡Hola!
Hoy es  ¡la noche de San Juan! La noche más mágica del años donde la buenas energías abundan y los deseos más bonitos se hacen realidad. Noche en la que el agua, elemento ancestral, actúa como una verdadera poción y el fuego de las hogueras como el mejor de los hechizos.

En Pegaso, la fiesta de la noche de San Juan tiene un lugar muy especial en su aventura, donde quise que los deseos de los protagonistas se hicieran realidad, aunque para ellos no bastaba creer en la magia de esa noche sino creer en sí mismos y en aquello que anhelaban con toda su alma.  
Quizá estuve tentada a hacer que no se cumplieran pero ¿por qué evitar la felicidad cuando está al alcance de tu mano?



¿Conocéis la leyenda de la noche de San Juan?
Cuenta la leyenda que en una noche estrellada un campesino paseaba por un frondoso bosque bajo la luz de la luna. Ese campesino buscaba algo que no llegaba a encontrar, un poco de suerte o magia, quizás, para resolver sus problemas y vivir en paz. Pensaba, tantos problemas y tan pocos recursos para resolverlos, son como un rompecabezas. Los problemas a los que se refería el campesino no eran materiales sino más bien espirituales y sentimentales. Quería conseguir un mínimo de alegría cuando la tristeza lo invadía, disfrutar de compañía cuando caía en las redes de la soledad,  alcanzar a su amor verdadero cuando este parecía inalcanzable y se les escapaba como el agua entre los dedos.
Al alzar la vista al cielo, vio pasar una estrella fugaz e ilusionado pidió a los astros y seres que guiaban ese loco mundo que por una vez diesen la oportunidad de que la fe de los humanos que no había sido mermada tuviera el poder de conseguir los más anhelados deseos de su corazón.
En un instante, la estrella fugaz se detuvo en el cielo y estalló en millares de pequeños fragmentos de fuego, cayendo más allá de lo que los árboles del bosque le permitieron observar.
El campesino persiguió, curioso, al grupo de fragmentos que le parecieron más cercanos, llegando justo a tiempo para ver como caían en un caudaloso y gran río, pudiendo observar como los pequeños fragmentos de fuego se fundía con las aguas del mismo.
Por impulso, tal vez por instinto, el campesino, con ayuda de su mano, cogió un poco del agua del río y empapó su rostro con ella, a la vez que cerraba los ojos para sentir como la esperanza, la ilusión y, sobre todo, la fe, inundaban todo su ser.
Aquel año, a pesar de venir acompañado de problemas y dificultades, también lo hizo de optimismo y buena suerte. La felicidad no era empañada por la tristeza, la soledad era mitigada por la amistad y el amor... aunque complicado, era hermosa y dulcemente disfrutado.
De manera que, cada año, la noche en que vio tan maravillosa estrella, el campesino volvía al río para empaparse de sus aguas y llenarse de fe para el próximo. Pasaron los años y la tradición continúo, contando la historia mágica del fuego y el agua generación tras generación, hasta que esta llegó a oídos de todo el mundo. Aunque no todos se dirigían al río de la historia, pues afirmaban que, cómo el curso del agua es continuo y llega a todos lados, la magia de la misma también lo haría.
Pero como toda historia, con el transcurso del tiempo, varió, llegando convertirse en leyenda, siendo una mera fiesta para unos, una tradición para otros y un noche de magia para aquellos a quienes la fe no era olvidada.

Y esta es la leyenda de la noche de San Juan, ¿os imagináis cuál era el nombre de aquel campesino?

Espero que esta noche sea mágica y buena para vosotros, siendo la fe vuestra mayor fortaleza.
Suerte, luz, fuerza y feliz día (noche) a todos.
  


jueves, 12 de junio de 2014

BELEROFONTE


¡Hola!

Perdón por dejar esto demasiado tiempo sin atender, aunque sé que vosotros lo mantenéis con vida ;)

He estado paseando por mi cabeza (entre estudiar y hacer trabajos para la facultad)  un mito....  Un mito muy interesantes. ¿Conocéis la historia de Belerofonte?

Belerofontes es un antiguo héroe griego muy poderoso, aclamado y envidiado, famoso por acabar con la terrible Quimera (un ser monstruoso con dos cabezas, de cabra y de león, que lanzaba fuego por una de sus bocas). Belerofonte fue enviado por el rey Yóbates a matar a la Quimera, con el objetivo encubierto de que fuera dicho héroe el muerto por haber "deshonrado" a su hija ya casada (una mentirosa pues ella engañó a todos con respecto a Belerofonte al ser rechaza por el mismo cuando ella le reveló su amor).


Belerofonte aceptó la valerosa misión que lo colmaría de gloria pero, pensando que necesitaría algo de ayuda, acudió a los dioses. La diosa Atenea atendió sus plegarias al ser su mayor fan. Para ayudarle, le entregó a Belerofonte un freno de oro con el que poder encontrar al mítico y poderoso caballo alado: Pegaso.
Pegaso, era un ser libre y salvaje, muy querido por Zeus. Al plegar sus enormes y blancas alas, se le podía ver cruzar el amplio cielo sin obstáculo alguno que pudiera impedírselo, con los rayos de sol iluminando su hermoso pelajes y jugando a través de sus plumas. Y, en la noche, era amigo de la luna y las estrellas.


Belerofonte lo encontró gracias al freno de oro y lo dominó. Con Pegaso bajo su control fue al enfrentamiento contra la Quimera y venció, convirtiéndose en un gran aclamado y glorioso héroe.


Sin embargo, a pesar de haber concluido su misión, Belerofonte continuó manteniendo consigo a Pegaso. No sólo porque así era más poderoso, sino también porque el rey Yóbates le seguía enviando a misiones temerosas. En todas ellas salió victorioso, tanto es así, que el rey le terminó por ofrecer la mano de una de sus hijas (menos de la casada, obviamente).
Belerofonte llegó a ser rey y tuvo dos hijos. En todo ese tiempo, Pegaso permaneció con él, bajo su control, haciéndole héroe. Belerofonte se convirtió en un orgulloso  y, por todo lo que tenía (Pegaso incluido), un odiado de Zeus.   Así que un día que cabalgaba  por lo cielos sobre su querido Pegaso, el padre de los dioses le lanzó un rayo. Pegaso se asustó ante el ataque, tirando de sus lomos a Belerofonte, quien cayó y murió.
En cambio, Pegaso, gracias a Zeus, puedo continuar volando hacia los cielos, donde por fin recuperó su libertad, llegando a alcanzar las estrellas, haciéndose parte ellas. De ahí que Pegaso sea una constelación hoy en día.



Y ese es el mito de Belerofonte. Os estaréis preguntando ¿por qué os lo cuento? Por dos razones: una, siempre es bueno saber un poco de mitología, y dos, quizás os resulté familiar en el futuro...

Más en la próxima entrada, más sobre Pegaso y cosas interesantes.
Suerte, luz, fuerza y feliz día a todos.